lunes, 25 de octubre de 2010

Entre manzanillas y finos, ¿cuál es la diferencia?

Llegamos a la inauguración de un nuevo bar en San Rosa ( La Espumita). Allí pedimos dos finos. La camarera (que tiene algunos años más que yo) no sabe lo que es.

Se lo explicamos, le decimos que es vino blanco y después de eso nos quiere poner manzanilla de la Guita. Me revuelvo en mi tumba (cuando la tenga) y le decimos que queremos fino de Montilla. Después de preguntarle al encargado si eso existe en el mercado, nos dice que sólo tiene Manzanilla y nos la sirve en el vaso de un chato de vino.

Menuda cara pusimos, pero ella se quedó tan pancha y puso otra cervecita. Qué tristeza. ¿Esa mujer nunca ha ido a la cata? Y lo que es peor, que tenían catavinos y estaban allí muriendose de la risa, mientras nos terminabamos de tomar el fino en vaso bajo.

Para colmo nos invitaron, porque era el día de la inauguración. Una pena. Después de tanto esfuerzo, que tenía buena pinta el sitio, con semejante empanamiento, y es que hay a muchos que no los puedes sacar de la triste cervecita.

jueves, 21 de octubre de 2010

Mis vídeos de Bodegas de Montilla

Hola amigos:

Os dejo aquí una miscelánea de algunos vídeos que me parecen interesantes de las bodegas de Montilla-Moriles. Muchas de ellos se pueden visitar turísticamente, por lo que yo os animo a que llaméis y concertéis una cita. En primer lugar, la Cooperativa La Aurora.
 También podemos ver, otro vídeo sobre Bodegas Robles, unas bodegas que resurgieron de sus cenizas para desarrollar agricultura ecológica y ganar muchos premios. Esta bodega es una muestra de que se pueden hacer las cosas de otra manera sin perder la esencia.

domingo, 17 de octubre de 2010

Un sumiller, de los de cachondeo.

Hola:
Para los que piensan que no quieren beber vino, porque no saben de él, pues ahí va un vídeo divertido, porque siempre hay que animarse a probar nuevos caldos, y saber si nos gustan o no.
Sobra decir, que Martes y Trece, son la caña.


Una pena, que el fino no esté de moda

El otro día ( tal como el otro del mes de octubre) paseaba por la Judería y entré en una nueva taberna- tablao flamenco que han puesto muy cerca del Albergue Juvenil. En la puerta había el típico cartel que rezaba así " Caña + tapa : 1.5.

Yo entré y pedí un fino de Montilla ( como no) y me encontré con la grata sorpresa que era de las Bodegas Los Olivares. Éstas bodegas están al principio del pueblo y la verdad es que yo he estado en ellas muchas veces, aunque en los últimos años han ido un poco a la deriva. El caso es que el fino estaba exagerado de bueno, a pesar de que era un fino para iniciados en el mundo de los generosos.

Lo importante, es que pasaba el tiempo, pero no me traían la tapa y al final, me tuve que tomar mi vinito a palo seco. Cuando pedí la cuenta, le pregunté a la camarera ( muy educadamente) que si se habían olvidadado de mi tapa. Cuál fue mi sorpresa, que ella me dijo que con el fino no ponía tapa ( la tapa era una rodaja de morcilla, vamos que tampoco era una delicatessen) y que sólo era con la cerveza, porque si no, no le salían los costes porque el vino era muy caro.

Yo la miraba incrédula, puesto que desgraciadamente, el litro de fino suele rondar los 2 euros, del cual se sacan unos 10 medios. Vamos que si hubiera sido una turista quizás me lo hubiera tragado. Acto seguido ella me preguntó que para ponerme tapa con el vino, me tendría que cobrar más... Ella intentó explicarme que si quería tapita gratis, mejor que hubiera pedido cerveza. Yo ya indignada me iba a marchar, y fue en ese momento, cuando la criaturita, me dijo que como los que estaban al lado, tomandose 2 cervezas, no se habían tomados sus morcillas, que si yo las quería. No puedo expresar con palabras, la cara que tuve que poner, cuando dije un adios.

Es una pena, porque el sitio tenía muy buena pinta, muy cuidado, con flamenco, con unas columnas árabes muy bonitas, con un montón de botellas de vino decorándolo, incluso con barriles... Para que después esa señora me viniera a decir que mejor tomar cerveza. A lo que yo le respondí que prefería Montilla-Moriles.
Me indigna que en una ciudad como esta, los empresarios premien ( aunque sea con una ridícula tapa) el consumo de cerveza ( que no tengo ningún problema con ello), pero al menos, por una cuestión de estilo deberían dar tapita , ya que lo ponen, a todas las personas que pidan una bebida y no animen a no tomar vino. Un desastre, vamos.